La estancia no ha sido lo que esperábamos. Estuvimos en una habitación para 8 y éramos tres, por lo que sobraban camas por todas partes. La ropa de cama era demasiado corta y se salía todo el tiempo. Las almohadas eran pequeñas e incómodas. No había utensilios de cocina, ni siquiera un vaso, salvo en zonas comunes, lo cual era bastante incómodo. Nos encontramos dos cucarachas en la habitación. La primera noche apenas pudimos dormir por el ruido que hacía la gente cuando llegaba de madrugada. No lo recomendaría para ir en familia.