Hotel formado por mini apartamentos individuales con total intimidad. Un parking amplio donde dejar el coche. Un desayuno cocinado en el momento con un bien café. El chico que lo regenta es un encanto, servicial y muy amable. Tiene una cafetería donde se hace el check in que cierra a las 5 de la tarde, pero puedes avisar incluso por Messenger de tu llegada, ya que vive justo detrás de la cafetería. Van a muy cómoda.